Ejemplo de proceso para consensuar criterios de evaluación

Ejemplo de proceso para consensuar criterios de evaluación

Escuela La Roureda, 6º, Mercè Mas, Sant Esteve de Sesrovires

Los alumnos han hecho experimentos relacionados con los cambios del agua a lo largo del ciclo natural. Cada equipo de alumnos ha hecho un experimento sobre uno de los cambios, que luego deberá repetir ante los compañeros y explicar.

Tabla de evaluación de la explicación oral de un experimento sobre el ciclo del agua (E: experto, Av: avanzado Ap: aprendiz i N: novel).

Antes de empezar a preparar la presentación oral, han consensuado entre toda la clase una tabla con los criterios de evaluación de realización (figura 10). Estos alumnos ya conocen la Base de Orientación para pensar sobre los experimentos a partir de plantearse preguntas del tipo: ¿Qué queremos saber? ¿Qué tenemos? ¿Qué hacemos? ¿Qué creemos que pasará? ¿Qué pasa? ¿Por qué pasa? ¿Qué pruebas tenemos de este porqué pasa? y, por tanto, rápidamente hacen propuestas aplicables a los experimentos realizados.

Cuando cada grupo hace la presentación, los compañeros y la maestra completan la tabla, y se la dan al grupo que ha presentado.

Este grupo tiene que hacer un resumen de las recomendaciones recibidas y decidir qué tendrán en cuenta la próxima vez y por qué.

Ejemplo de coevaluación entre iguales

Escuela Banús, 2º, Santa Coloma de Gramenet

2º de primaria

Los alumnos han realizado un experimento y redactan el informe. Tras consensuar con todo el grupo-clase los criterios de evaluación, cada pareja de alumnos evalúa el de dos compañeros a partir de identificar en el texto dónde se habla de las acciones realizadas (subrayan con diferentes colores las acciones), analizar qué han escrito y hacer propuestas a los compañeros para mejorarlo.

Tomar decisiones sobre qué hacer para superar las dificultades y, al final del proceso, para cualificar

Se pueden tener muchos datos, e incluso haberlos analizado, pero si no se toman buenas decisiones para aprender, no servirán de nada las horas dedicadas. Las decisiones que sirven para aprender son las que toman los propios aprendices en interacción con compañeros y con personas adultas, porque sólo ellos mismos pueden corregirse para superar las dificultades. Y las decisiones que sirven para cualificar tienen sentido si posibilitan comprobar lo aprendido.

Para hacerlo hay que tener presente que:

  • Para aprender, no se regulan los resultados de una tarea, sino algunas ideas o procedimientos que se han activado al realizarla, las acciones aplicadas, o incluso los sentimientos que nos han generado su realización.
  • Las propuestas deben concretar qué cambiar del pensamiento, de la acción, de las maneras de expresarse o de las emociones, cómo cambiarlo y porqué esta decisión puede ser idónea. Las decisiones las debe tomar el propio alumno (con la ayuda de adultos y de compañeros), ya que es el único que puede corregirse.
  • Los errores, obstáculos o dificultades se regularán uno a uno. Cuando hay muchos no se puede pensar en superar todos a la vez. Por lo tanto, hay que priorizar, empezando por las dificultades más básicas.
Carpeta de aprendizaje del proyecto: ¿qué he aprendido?

La carpeta de aprendizajes o portafolios es el instrumento más idóneo para explicitar la toma de decisiones (y, de  hecho, todo el proceso de evaluación, ya que también debería recoger los datos y su análisis). Pero también hay otros: contratos didácticos y propuestas explicitadas en actividades de coevaluación, entre otros.